Las primeras previsiones para este 2022 son positivas, ya que se prevé un crecimiento en la demanda y en las transacciones por lo que las compraventas aumentarán en número.

En varios estudios realizados, respecto a la demanda, se estima que la inversión inmobiliaria comercial europea agregada aumentará hasta un 5% en 2022, y volveremos a estar al mismo nivel que los números anteriores a la pandemia.

En transacciones, la previsión es variable porque se prevé una inflación que no estamos acostumbrados a lidiar y un importante desequilibrio a nivel social, pese a esto se sigue suponiendo que las transacciones seguirán subiendo.

¿Con estas previsiones crecerán los precios?

Desde la pandemia, los precios han bajado y en los mercados debido al gran número de operaciones en las principales ciudades, se estima que la subida de dichos precios no supere el 2%. La previsión de crecimiento de precios a cierre de 2021 es de +3,6% y para 2022 es de +4,2%.

La siguiente pregunta es: ¿Qué zonas primarán en la búsqueda para comprar una vivienda?

Se mantendrá la misma estrategia desde la pandemia, ya que la gran mayoría de los compradores buscan espacios amplios y zonas de residencia, por lo que la periferia de las grandes ciudades seguirán creciendo.

¿A qué inconvenientes nos vamos a enfrentar?

Seguiremos en el mismo barco, ya que los grandes problemas para que suponga un gran aumento de las compraventas están en la dificultad de adquisición de vivienda para los jóvenes y el reto de sostenibilidad.

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